BMW suelta los detalles de su nuevo deportivo eléctrico que busca competir con el Porsche Carrera, el i8.
Concebido como un híbrido con un manejo dinámico, el i8 combina un motor eléctrico de 129 hp que maneja las llantas delanteras mediante una transmisión automática de dos velocidades, y un motor a gasolina de 3 cilindros turbo y 1.5 litros de desplazamiento que manda sus 228 hp a las ruedas traseras a través de una transmisión automática de seis velocidades. Trabajando en conjunto, ambos motores ofrecen 357 hp, 420 lb/ft y tracción en las cuatro ruedas.
Esto se combina con el dinamismo que el peso ligero del i8 y su bajo centro de gravedad ofrecen. El chasis está construido de aluminio, los vidrios están fabricados del famoso anti rayaduras Gorilla Glass que además de ser más ligero ofrece mayor insulación del sonido, mientras que el llamado por BMW ‘Life Module’ y otras partes del auto están hechas del ya famoso plástico reforzado en fibra de carbono. Gracias a esto el i8 pesa 1,490 kg, lo que es 22.7 kg más que su ya oficialmente nombrado rival, el Porsche Carrera 4S PDK.
Siendo un híbrido, el i8 tiene un rango puramente eléctrico de 35 km, con un tiempo de carga de tres horas y media a través de un circuito convencional de 120 volts y 12 amperes, o de hora y media a través de un cargador de 220 volts.
En el i8, híbrido no significa aburrido. El auto es capaz de acelerar de 0-100 km/h por debajo de los 4.5 segundos y alcanza una velocidad máxima limitada de 250 km/h. Todo esto mientras es capaz de ofrecer un consumo medio de 2.5 l/100 km y emisiones menores a los 59 gramos de CO2 por kilómetro.
Como comparación el Porsche Carrera 4S PDK acelera de 0-100 en 4.3 segundos, alcanza una velocidad máxima de 297 km/h y consume 9.1 l/100 km emitiendo 215 g de CO2 por cada kilometro recorrido.
Suena bastante emocionante, pero aún así preferiría BMW usara otro tipo de energía alterna o que el i8 fuera el deportivo insignia de la marca con un V8 debajo de esa carrocería tan sexy y moderna. Los autos eléctricos son la moda, pero no son el futuro.