Este video muestra algo que falta en el periodismo automotriz, diversión.
Después de ver éste video me doy cuenta que cuando alguien se sube a un auto deportivo, exótico o semejante, periodista o no, muchas veces trata de comportarse como indiferente, como si no fuera la gran cosa.
El probar un auto no es cuestión de diversión, es cuestión de quien “maneja mejor”, de quien ha piloteado o se ha subido un auto mejor que ese, o de otras cosas más que no tienen nada que ver con la idea principal, la emoción de conducirlo.
Si todos tomáramos la actitud de éste niño en ocasiones donde amerita ‘divertirse como enano’, nos daríamos cuenta que el disfrutar algo, muchas veces es cuestión de fijarnos en las cosas más simples.